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lunes, 23 de mayo de 2011

El autocontrol. ¿por qué me enfado?



Reflexión sobre la caja de cambios. El interior.  1.2. Drivers. 










Algunas personas se enfadan más fácilmente que otras. Sin embargo, el grado de irritabilidad no está generalmente relacionado con el acontecimiento desencadenante. Es decir, no se trata de que a la persona que se enfada más le sucedan cosas más desagradables y en mayor número que a la que se enfada menos. Dos personas distinta, ante un mismo acontecimiento, pueden reaccionar de manera opuesta. Por ejemplo, ante un atasco automovilístico vemos que hay personas que reaccionan con paciencia y aprovechan para escuchar la radio, charlar con el compañero de viaje o leer el periódico, mientras que otras personas montan en cólera. La irritabilidad es, por tanto, un estado más que una consecuencia. 


Es innegable que la vida cotidiana está salpicada de pequeños acontecimientos más o menos molestos. A botepronto se me ocurren unas tantas situaciones capaces de molestarme: 
Los atascos en la ciudad cuando me dispongo a recoger mis hijos del colegio. 
Interferencias en el teléfono justo cuando estoy en medio de una conversación importante. 
Una broma de mal gusto referente a los psicólogos.
Un error en la transacciones bancaria. 
El retraso de un avión que me impide llegar puntual a una conferencia. 
Camino por la calle en un día lluvioso y un coche que pasa por mi lado me salpica el traje. 
Un paciente no sigue mis indicaciones y me acusa de que el tratamiento que le he propuesto es inoperante. 
Una vez más, el encargo a la imprenta se retrasa.
El pintor pretende no respetar el presupuesto que habíamos acordado. 
Presto un libro y no me lo devuelven. 
La insistencia de un vendedor ambulante a que compre sus productos aunque desde el primer momento le he advertido de que no lo haría. 
Puedes estar enfadado y saltar o callar, lo primero es lo más sano, lo segundo puede frustrar, pero no puedes ir por ahí saltando todo el rato. Si estas enfadado la postura ideal es hablarlo, dí todo lo que te pasa, y quedate relajado. Nuestro enojo se puede demostrar solo en ocasiones, algunas veces debemos saber que no es adecuado demostrarlo. 
¿ Quién no se enfada alguna vez? Es inevitable del ser humano, pero hay que controlar los impulsos ser los suficientes conscientes que tenemos un don especial que se denomina autocontrol del strees , todos podemos en algún momento sacar el tigre que llevamos dentro, pero ese tigre se puede educar igual que lo demás. 
Cuando sientas una ira grande hay una solución para bajar el nivel de enfado y es muy sencillo y fácil, en primer lugar antes de hacer nada mantén el silencio total y mentalmente cuenta 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. y 10. ahora respira profundo y cálmate. 
Sea el motivo que sea piensa que nada que provoca ese enfado merece que tu salud se resienta. No hay una causa para ponerse enferm@ todo tiene que pasar a un sentido de sin valor, es decir, ( no merece la pena).
En todas las teorías se llega a una conclusión y es la vía de no llegar a provocar tal enfado, prevenirlo.
 ¿Por qué me enfado?
Nos enfadamos por cualquier tontería, cosas que no tienen importancia. Algo que siempre viene provocado por los demás. Pues NO, no son los demás, es usted mismo, SI, parece algo extraño pero es así, no debe influenciarle nada que digan o hagan los demás, su estado de irritación nada tiene que provocarlo, y si lo nota en algún momento salga de la situación, ¿como? pensando en positivo, su pensamiento hace que se irrite o que no lo haga. Ejemplo; Estoy esperando a mi marido y no llega, justo aparece en el último momento, ahora puedo pensar dos cosas; 1º que mal ya estoy cansada y llega tarde desde luego que desastre. 
2º Que bien, por fin ha llegado ya pensaba que no venia, pero en el último momento ha aparecido. 
Aquí vemos dos pensamientos, uno para irritarnos y enfadarnos, dos para sentirnos bien y no irritarnos por lo tarde que ha llegado, con esto queda claro que es la interpretación interna que damos a un hecho. 
Conclusión piense usted antes de irritarse la culpa no es de los demás sino suya. No le conviene enfadarse, no es una forma inteligente de solucionar nada, lo más razonable es hablar, aclarar todo y llegar a una manera educada de un acuerdo de las dos partes. El enfrentamiento es lo más perjudicial para usted.