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domingo, 24 de abril de 2011

La motivación. Todos tenemos motivación para hacer amigos.



Todos preferimos estar con otras personas, somos seres sociales y nos motiva hacer amigos. Pero hay grandes diferencias: mientras unos individuos sólo parecen estar en su salsa cuando se rodean de amigos, otros disfrutan también en los periodos de soledad.
Existen estudios que reflejan que, cuando se pide a un individuo que realice una tarea con otra persona, si su motivación social o de afiliación es muy alta, elige trabajar con un amigo aunque sea un incompetente. Por el contrario, las personas con un grado de sociabilidad bajo eligen la pareja a la que consideran más competente.
Los investigadores creen que nuestra motivación social es innata y se basa en la selección natural. Por ejemplo, el hombre primitivo tenía más posibilidades de sobrevivir y cazar si se asociaba con alguien que si actuaba solo.
Algunos psicólogos piensan que la sociabilidad se aprende mediante la experiencia: ya desde bebés somos atendidos, alimentados, tocados.. y nos pasamos la vida en presencia de otros seres. Estar con gente es garantía de bienestar y refuerza la seguridad, especialmente, en periodos de debilidad: la infancia, la vejez, la enfermedad....

buenas técnicas para solucionar problemas (psicología para todos)

Lo primero que hya que tener muy claro es el sentido de la justicia y del equilibrio, así como poseer asertividad, esa habilidad que permite defender los propios derechos a la vez que se respetan los derechos del otro. He aquí una pequeña técnica que puede servirnos de guía:

1. Definir el problema: qué es lo que ocurre, cuándo pasa y cómo.
2. Definir el objetivo: qué es lo que pretendemos cambiar.
3. Hacer una lista de todas las alternativas de solución que se nos ocurran, por remotas que resulten en un principio.
4. Hacer dos preguntas a cada alternativa ¿Es eficaz? ( si resuelve, al menos en parte, el problema) y ¿Es practicable? (si podemos llevarla a cabo).
5. Descartar aquellas que fallan en al menos una de las dos cuestiones.
6. Analizar las que quedan, a través de dos pasos: definir todas las ventajas de cada solución y definir todas las desventajas de cada solución.
7. Atribuir a cada ventaja y a cada desventaja una puntuación de 1 a 5 en función de su importancia.
8. Hacer un recuento numérico y quedarse con la solución más eficaz, más practicable y con más ventajas.